Una de las cosas más importantes que me enseñó un padrino que tuve en el grupo fue a agradecer.
No fue un trabajo fácil, al comienzo me costaba porque yo como neurótica siempre miraba lo que me faltaba y no lo que tenía. Cuando pude aprender a ver todo lo que Dios me había dado empecé a agradecer, a valorar, a mirar y a esforzarme cada día por ser un poquito mejor.
Hoy fue un domingo atípico.Sentada en la mesa almorzando con mi familia, me paré afuera como si estuviera viendo una escena de película me ví rodeada por el amor de mi familia. Me emocioné hasta las lágrimas, y agradecí a Dios lo que tengo; y el amor que siento por ellos que como buena neurótica expreso mal. Estoy en camino de aprender a hacerlo sin lastimar, sin pedir nada a cambio, con responsabilidad, sin miedo, sin pensar tanto....Sólo dejándolo fluir.
Hoy mi día estuvo lleno de momentos preciosos, una charla estupenda a la mañana por chat con una compañera del grupo, una siesta cucharita con mi marido después del asado del domingo mientras mis hijos jugaban en el fondo de casa, una junta de NA que me brindó mucha fortaleza y esperanza, un compartimiento de un compañero que sufrió mucho y pudo, puede y la sigue peleando. Una reparación de mi parte a una persona que ayer había tratado mal. El descubrimiento de un blog de poesías que me tocaron el alma, que me llegaron y me hicieron sentir .....
También hubo algunos momentos malos como es normal, pero el balance de hoy dió a favor. Y creo que cuando aprendemos a ver las bendiciones que tenemos en esta vida, siempre da a favor porque de todo se aprende, hasta de las malas experiencias. Nada se pierde todo se recicla para mejor.
Gracias Dios por el hermoso domingo que me regalaste. Estoy aprendiendo a amar a la vida.... Gracias!!!!!!
Algo de literatura como siempre para no perder la costumbre.
" Sólo por Hoy me adaptaré a la realidad, en lugar de adaptarlo todo a mis deseos y a mi voluntad. Aceptaré lo que el mundo externo me depare y haré lo mejor que pueda con ello".
Las falsas expectativas, el proyectarnos más de lo debido, el programarnos metas inalcanzables, el querer que el universo que nos rodea gire a nuestro alrededor con nuestras propias pautas, es algo que nos caracteriza.
Poco a poco debemos comenzar a debilitar ese Yo grandote, pues es él, que nos hace actuar así.
¿Cómo?, empezando a cambiar en pequeñeces; aceptando que mi medio ambiente es el que me rodea, y no el que Yo quisiera.
Nuestras vidas se han hecho para vivirlas con Alegría, con Amor, no para pasarnos la mayor parte de nuestras horas pensando y filosofando en lo que deberían ser.
De esta forma tomaremos la realidad como venga y nos adaptaremos a ella.
(Extractos tomados del Sólo Por Hoy desarrollado).
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